Un grupo de fieles comenta con su silencio, a la salida de misa de doce, la deriva laica y anticlerical que el gobierno de Zapatero y él mismo han imprimido a la sociedad de este país, hasta hacerla parecida a la que quemaba iglesias en la semana trágica y en el 36. Y el pastor con su rebaño, con su zurrón y las vacas, quieres ser luz, o campana, y despertar a su amada.
Sin juramento me podriais creer que quisiera que este blog, como hijo del entendimiento, fuera el más hermoso, el más gallardo y más discreto que pudiera imaginarse. Pero no he podido yo contravenir al orden de naturaleza, que en ella cada cosa engendra su semejante. Y, así, ¿qué podía engendrar el estéril y mal cultivado ingenio mío, sino la historia de un hijo seco, avellanado, antojadizo y lleno de pensamientos varios y nunca imaginados de otro alguno?
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18 comentarios:
me pido ser de las cabras, al menos son menos y tienen más personalidad :)
¿Otro Gallifante para mi?
Será por ofrecer mi sufrimiento a nuestro Señor. Aquí postrado encomiendo mi quejoso cuerpo y mi alma inmaculada a Nuestra Señora para que interceda ante el Padre y si es su deseo cure mis males, si no seguiré bebiendo de este amargo cáliz.
y referente a tu comentario...¿no será que el pastor no cuida como debiera al rebaño?
Ya se me coló una Cabra Loca...si es que...me las sueltan por el monte y por internet y claro...bueno Clidice...el Gallifante para ti.
hihihihihi ^^
El rebaño que detiene el moderno automóbil es un fenómeno entrañable. Bien aprovechado para la ocasión, pero lamento decirte que me he quedado mirando las fotos y prestando una atención escasa al texto. Eso me pasa por deformación profesional. Eso de trabajar de maestro de primaria ya lo trae.
Clidice, pero donde están esas cabras? Me he perdido algo?
Malo, yo al pastor le veo bien atento.
Lluis, no es la salida de misa de doce, ciertamente, pero si es la subida al monasterio de San Juan de la Peña, desde Jaca, por la parte difícil, que es por donde nos maldirigió un aborigen con mala hostia. No sabía que en primaria fuera más importante la imagen que la palabra, pero tomo nota.
¿El gobierno de Zapatero y él mismo?
Ja.
No diría yo tanto querido Pepe, no diría tanto, se descarrian demasiadas ovejas y sus ayudantes...qué decir de esos lindos pastorcillos a los que tanto gusta retozar con las ovejas y los corderillos... Ese pastor...
¿Se te durmió la amada?
Joe Pepe, te ha dado fuerte con los corderitos, su silencio, el hanibal la clarice, los higos y las bananas... Qué batiburrillo. Por cierto, dónde queda la ley esa de libertad religiosa? Cuándo va vivir mejor este rebaño que con Zp, que siempre les conduce a verdes pastos...(o eran brotes, o es que la crisis de la deuda ya estaba superada, no sé, me pierdo, Pepe) Y cómo sabes lo de la misa de 12? No dices que no practicabas? Ilumíname, que me acabo de leer el túnel de Sábato y creo que aún no he salido.
V, por qué te da la risa?
Hitos, mil gracias derramando,
pasó por estos sotos con presura,
y yéndolos mirando,
con sola su figura,
vestidos los dejó de su hermosura.
A los chicos mañana.
¡Ay, quién podrá sanarme!
Acaba de entregarte ya de vero;
no quieras enviarme
de hoy más ya mensajero,
que no saben decirme lo que quiero.
Malo, yo al pastor le veo muy en su papel. Y tú, Lázaro, no me líes, que este post no tiene nada que ver con Hannibal, ni son Clarice, aunque también hable de los corderos y su silencio; este rebaño, es otro, es la grey. Tampoco tiene nada que ver con metáforas frutales.
Hitos, mi estrofa es de San Juan de la Cruz, dirigiéndose a su amado. Y la tuya? (borro tu tachón)
Es la siguiente estrofa del mismo poema
Y... ¿Cual es su papel, amado hermano en la Fe?
Hitos, y aun sigue:
Mi alma se ha empleado,
y todo mi caudal, en su servicio;
ya no guardo ganado,
ni ya tengo otro oficio,
que ya sólo en amar es mi ejercicio.
Malo, léelo en el párrafo de más arriba.
Pepe: "que ya sólo en amar es mi ejercicio"
Me tienes anonadado enlazando mi pregunta con lo versado.
Es por distraerte de los dolores de la ciática, Malo. Si se puede, curar, si no, aliviar (finalmente, paliar, y consolar a los deudos, llegado el caso).
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