Sin juramento me podriais creer que quisiera que este blog, como hijo del entendimiento, fuera el más hermoso, el más gallardo y más discreto que pudiera imaginarse. Pero no he podido yo contravenir al orden de naturaleza, que en ella cada cosa engendra su semejante. Y, así, ¿qué podía engendrar el estéril y mal cultivado ingenio mío, sino la historia de un hijo seco, avellanado, antojadizo y lleno de pensamientos varios y nunca imaginados de otro alguno?





domingo, 10 de abril de 2011

Tartessos: otra forma de gozar

Hace unos días hablamos de El Aljibe del Poeta. Hoy os llevo al sur de la ciudad.

En una ranura que hay en lo alto de "El paredón" (oficialmente "Pantalla"), edificio reciente y emblemático,

que forma parte del bello e inquietante conjunto arquitectónico minimalista

de la caja de ahorros La General,

se encuentra el restaurante Tartessos.

Apenas ocho metros de anchura, como la cabina de un avión abierta al paisaje.

Desde allí, hacia el este, se divisa El Cubo -del mismo conjunto-, detrás la sierra,

y mirando hacia el oeste, la vega surcada por el Genil.

(El cocinero es vasco, y por tanto la comida tiene esas raíces. Es caro, pero -que coño!- hay que reactivar la economía, no? Si venís -de uno en uno, de una en una, de dos en dos lo más-, estáis invitados ;-)

20 comentarios:

Clidice dijo...

Lástima que hayan "cortado" el vidrio con esa supuesta valla, se pierde el efecto vértigo. Caxis! Y estaba por ir y todo eh! ;)

Pepe dijo...

Es cierto eso, Clidice. La valla es un elemento innecesario y que rompe parte del hechizo, pero tampoco parece tan disuasoria como para hacerte cambiar de planes, no?

Clidice dijo...

Por supuestísimo que si, jamás iria a un sitio donde me pasaría todo el tiempo pensando en que lástima lo de la valla. Dime autista, pero hay cosas que cuando me molestan, me molestan mucho. ;)

María dijo...

ba a decir, que me parece un lugar precioso...pero al leeros, tengo la sensación que tres son multitud :-)
Así que cuando resolváis la disquisición de la valla CLI..¡¡mira que eres dura tú, mujer!! ¡¡total por un cristal de nada!! jajaja vuelvo... si no molesto, claro:-)

Un besito y...si a caso... siempre existen las mazas...Pepe, ya sabes lo que te queda:))

Feliz noche... a ver cómo os encuentro mañana

Pepe dijo...

Pos nada, Clidice, a ver si hablo con el arquitecto y consigo una reforma para cuando lo vuelvan a encalar; antes no va a poder ser, que está mu alto.

Y tú, María, no te cortes, que he dicho que hasta de dos en dos. (No es el cristal, creo que Clidice lo que quiere quitar es la valla).

Clidice dijo...

Na María, defectos de alguien que se ha pasado media vida, no, más de media vida, en la construcción. Cuando se hace una cosa de estas, pour épater, vamos, me extraña que el arquitecto haya diseñado una valla que rompe con todo el concepto de la obra. Más bien tiene pinta de imposición legal, o de los propietarios, al acojonárseles el personal. Y si no es así, no es tan bueno el diseñador, ya que para nada rompe, sino que se queda a medias. Algo demasiado común, dicho sea de paso, en esto de la arquitectura. Y no deja de ser triste, que en estos edificios es donde se puede jugar a ser dios.

Pepe dijo...

Clidice, a mi me pega a aplicación de normativa legal; el espacio se destinó a uso público y seguro que eso conlleva imposiciones.

María dijo...

Es cierto que es un tanto absurda, además de antiestética, esa valla. Máxime...tras el cristal... que sí que es necesario, si no se quiere salir volando agarrados a los manteles...

Para que te consueles CLI, aún HAY VALLAS MUCHO MÁS DOLOROSAS...A LA VISTA
Es un monasterio precioso que hay en el Bierzo. Cada vez que la veo, me dan ganas de estrangular al que la colocó, por imposición legal o estupidez manifiesta, me da igual...y curiosamente, el arquitecto del proyecto se ha pensado que le da un toque rompedor al conjunto... a mi, sólo me rompe los ojos. Cuestión de gustos, supongo.

En todo caso, a parte de ese detalle ( por cierto, vaya observadora eres:-) me gusta el diseño aeronáutico del restaurante y la idea de colocarlo justo allí arriba...

¿Los camarer@s van vestidos de azafat@s? ¿hay bussines class y turista?:-)

Muchos besos y feliz día

Clidice dijo...

Lo del monasterio del Bierzo, María, creo que puedes estrangular a quien sea el responsable tranquilamente, ningún juez en sus cabales te condenaría. Por dios, que absurdos podemos llegar a ser. Me has hecho recordar cuando estuve en lisboa, en el Castelao de Sao Jorge, que la gente se pasea por las murallas, de un palmo de altura el borde, sin ninguna valla protectora. Se me hizo raro, incluso comentamos que en nuestro país ya se hubieran hecho "actuaciones" de seguridad que lo hubieran destruido.

Ah! y colecciono, de hace años, artículos sobre arquitectura y arquitectos. Es algo que me apasiona.

Lluís Bosch dijo...

Me da un pánico tremendo esta delgada línea que no separa sinó que mezcla políticos y constructores, ese lento trasvase de un lado al otro.
Dices que invitados? oye,m me lo pienso un momento.

NERON dijo...

Joer hermano,

vas a comparar tú esa pijada con mi taberna...por diosss. La mugre nos hace libres.

M´he picao.:)

V dijo...

A mí no me lo digas muy alto que si es gratis, aunque sea a churros reveníos yo la primera de la cola. Nací tacaña (o sin un duro, que para el caso el resultado es el mismo) qué le vamos a hacer :)

Muy chulo el edificio, la verdad, lo había visto por la TV, lo que no sabía era que había un restaurante ahí. Aunque no me extraña lo más mínimo. Y luego las ventanas del edificio parecen de camarote. Menudo agobio deben provocar. Como para trabajar ahí, el horror. Nfins...

Besets.

p.s. El edificio este del cubo también es horrendo. Lo mire por donde lo mire me lo parece. Vaya cosa fea.

Pepe dijo...

María, confieso mi fascinación por esa mezcla de piedra histórica y pragmático acero inoxidable que se da en ese monasterio del Bierzo. Danos la dirección que quisiera hacer fotos propias. Me parece que en el Tartessos hay una única clase, aunque puedes comer a la carta o el menú degustación; hasta donde pude observar los camareros y camareras iban vestido de camareros y camareras.

Se ve, Clidice, que le tenéis envidia a Portugal, "l'autonomia qu'en cal". También hasta hace poco allí la gente iba sin casco en las motos, y entraban con sus vehículos en las travesías desde las calles transversales sin hacer ceda el paso ni stop. Los tiempos están cambiando también para ellos, hasta el punto del rescate. Después venimos los de Ehpaña, dicen.

Pepe dijo...

Lluís, ese edififcio -el paredón, el pantalla- se inauguró hace poco, y es sede de un centro de memoria histórica que aun no he visitado. Supongo que estaría diseñado, y que sería ejecutado, desde bastante antes, cuando aun las cajas de ahorro ataban las hipotecas con longanizas y extras para el Porsche Cayenne; no tengo ni idea de cómo le va a esta caja; sé que se ha fusionado con otras, entre ellas una de Sabadell. Hago votos por su estabilidad financiera -pues me va en ello- y porque la hipoteca de El Paredón / Pantalla esté ya amortizada.

ATB, hermano, nada que ver, donde se ponga una buena taberna... Pero ya sabes, tú también estás invitao.

Y tú también, V, que solo tienes que preavisar para reservar, sola o en compañía de otro/otra. Ya verás como en directo ni las ventanas te parecen tan de camarote ni el cubo te parece tan feo; todo es relativo; minimalismo puro.

Hitos dijo...

Ni atá subo yo ahí. Bueno, si me atan con arneses pegaos a la pared... de todas formas no sí si iba a poder comer algo, seguro que se me cierra el estómago.

Mucha altura es esa, muchas altura pa mí.

Pepe dijo...

Hitos, si aprovechas la invitación y vienes -digo vienes-, ya verás como comes. Las alturas dan hambre.

Gemma dijo...

A cúanto sale más o menos por comensal? Hay que reservar?

Pepe dijo...

Gemma, ya ves que había mesas libres y era sábado, pero por si acaso conviene reservar, que luego llegas y te encuentras que ha ido a comer allí la familia telerín con todos sus miembros a celebrar el cumple del abuelo, aunque es sitio más de parejas o pequeños grupos que familiar. No había niños, lo que siempre se agradece, aunque no me consta que estén prohibidos. Te diré que hay un menú degustación a 50 leuros por boca, que suben a 70 con maridaje de vinos. Optamos por menú libre, un par de entrantes compartidos y un main course pa cada uno, y anduvo la nota alrededor de los 120 leuros, sin botella de vino, solo un par de copas de vino de la casa (ribera joven) y alguna cerveza en el previo. Que conste que cuento esto a tu demanda.

Gemma dijo...

Pues claro, consta en acta. No me sabría mal pagar eso si se come bien. Pero pensándolo mejor, el 17 comeré en la Taberna que tu hermano ya sabe como me gusta todo.

Por supuesto tomo nota, no hay nada que me guste más que comer en el aire :D te imaginas un post mío explicando eso, jajaja.

Pepe dijo...

Gemma, no seré yo quien ponga objeciones a que hagas gasto en la taberna de mi hermano. Y avisa cuando escribas ese post.